La mejor leyenda urbana.

El término "leyenda urbana" es como se les conoce ahora, en realidad los rumores falsos, leyendas y comadreos siempre han estado vigentes en todos los ámbitos, especialmente en el rural. Me enteré el otro día de esta y es buenísima.

El 12 de mayo de 1863 salió publicado en la revista American Medical Weekly un artículo en el que se relataba un escabroso suceso.

El doctor L.G. Calpers relataba -más o menos- lo siguiente:

Durante la guerra de secesión americana un joven fue herido, atravesado por una bala que siguió su curso. Cerca, como a unos 30 metros, se hallaba una vivienda en la que se encontraban una madre y sus dos hijas adolescentes, con tan mala fortuna que la bala que había atravesado al joven se alojó en el estomago de una de las niñas, de unos 16 años. 

Del joven herido no sé más.

Quedó la niña herida muy grave, pero logró sobreponerse. Poco más tarde se descubrió que estaba embarazada. Lloraba la niña asegurando que era virgen, que no había tenido relaciones, cuestión que un doctor certificó. Pare un hijo aparentemente sano, pero que no deja de quejarse y llorar. Investigado el niño se descubre que llevaba una bala en su interior, la cual es extraída y el niño crece sano y feliz.

El brillante doctor Calpers exponía la siguiente tesis en la revista (adaptación festiva mía, no dispongo del texto original): al pasar la bala por los cojones del soldado, unos espermatozoides que estaban jugando a las cartas y bebiendo güisqui se vieron arrastrados por la bala. Va la bala con gran tino y se aloja en el útero de la muchacha. Los espermatozoides que no sabían si aquello de salir a tal velocidad por el aire era paja o qué, se encontraron el cielo abierto. Quedó embarazada, por supuesto, como no podía ser de otra forma. 

Tiempo después el brillante Calpers rectificó y dijo que era un relato que había escuchado, sin que él pudiera corroborarlo. Pero el mal ya estaba hecho; bajo el prestigio de una información de una publicación médica se hicieron eco los medios de comunicación de la época. No tardó en salir la leyenda de la india embarazada por flechazo que previamente había pasado por el escroto de un indio, etc.