¡Porno, porno hasta que nos salga por las orejas!

Pues que entre leyes de trato digno que ya no le podrás decir fea a la preciosidad, un tanto renacentista, de la Masturbito, y más leyes que nos preparan para que no nos metamos con los políticos, honrados gestores de nuestra voluntad popular, pues qué quieren que les diga... Me empujan al porno, al sexo como válvula de escape, al desenfreno, a la lujuria, a la guarrería sin disimulo, al yo qué sé qué inventarme nuevo que me dé morbo si ya me he paseado por todas las perversiones posibles...
Fue Marcela la que me comentó que en los sucesos de mayo del 68, De Gaulle o Pompidou, que no recuerdo quién, dijeron: "Mientras estén haciendo el amor, no están en las barricadas".
Sea pues y empornemonos. ¡Hasta las cejas de porno! ¡Mire porno y vote a su ladrón favorito!
Aparten a los niños que hoy va duro de verdad: porno de taller mecánico; la cumbre del género junto al porno de enfermeras, algo más refinado este último.