lunes, 8 de marzo de 2010

8 de marzo, día de la gran pringada.

Me escribe una amiga acerca de una entrada de este blog, donde me siento especialmente "buenista", diciendo más o menos que todas las invenciones humanas son mentira, referido al conjunto de normas sociales y sentimientos abstractos que hemos desarrollado. Para que no se hagan un lío contextual, un ejemplo: todo el entramado de la Ley, es una gran mentira que no tendría cabida en la naturaleza, con sus leyes naturales verdaderas.
Como me pilla en el momento buenista (no teman, no me he hecho de zetaperro; hay días que uno está buenista pero eso no quiere decir que esté gilipollas), le digo que otro día le contesto.
Pasan lo días y no tengo ánimo de contestarle, porque la profundidad y extensión de lo que abarca el planteamiento, no es que me venga grande, es que es grande y no veo manera de resumirlo en una respuesta escueta.
Pero sí puedo tomarlo por partes. Aprovechando la histeria vaginista-oficialista del "día de la mujer trabajadora", analizaremos una pequeña parte de toda esa gran mentira.

Están bombardeando las televisiones, prensa y voceros del sistema en general, con el tema de la desigualdad salarial, de la desigualdad jerárquica laboral y de la mayor tasa de paro de las mujeres. Ah, y de que la crisis afecta más a las mujeres, por alguna extraña mística del coño que no aclaran.
Bien. Ustedes, al igual que yo, vivirán en este país. Ustedes al igual que yo, conocerán a muchas mujeres que anhelan "quedarse en casa" si el marido o la marida gana lo bastante para permitírselo. Ustedes sabrán que la mayor tasa de reducciones de jornada y de excedencias voluntarias es femenina. Si ustedes no son subnormales entenderán que no hay ninguna diferencia salarial, de haberla es ilegal, entre hombres y mujeres. Sencillamente la mujer tiende más a quedarse en casa y eso es incompatible con ascender jerárquicamente y con ganar globalmente lo mismo. Son las leyes capitalistas, queridas, las mismas que les incitan a pelear contra los hombres, pavitas mías que caen en esa trampa.

Y ahora viene la sorpresa: me parece muy bien que bastantes mujeres tiendan al no-trabajo. Me parece que los hombres debieran tender a lo mismo, en este aspecto realmente las mujeres nos llevan (llevaban) ventaja. Todo el bombardeo de la mujer trabajadora y bla bla bla, no es para conseguir que la mujer y el hombre no sean explotados sin perder calidad de vida, eso sí sería revolucionario e innovador (y factible), todo el bombardeo es para conseguir una mujer laboralmente tan pringada como el hombre, que además cargue -inevitablemente- con sus añadidos naturales de la condición femenina; maternidad, mayor implicación afectiva y física con los hijos pequeños... La propaganda feminazi de momento no va a conseguir hacer parir a los hombres, aunque sería el sueño de alguna loca del género.

Si no andáis prevenidos, los medios de comunicación os llevaran a odiar a los oprimidos y amar a los opresores.Malcom X.

De nuevo una perfecta trampa del sistema y de nuevo el pueblo cayendo estúpidamente en ella. Ningún medio, que yo haya visto, ha dicho: "Basta ya de trabajos estúpidos y alienantes. Basta ya de trabajos parásitos que nada producen. Basta ya de perder tiempo en las oficinas mirando internet, porque hay que estar 8 horas (o más). Basta ya de especulación que no permite vivir con un sueldo, cuando la comida se pudre en los campos porque al agricultor no le pagan lo que cuesta labrarla. Basta ya de mentiras: trabajemos hombres y mujeres lo justo, tengamos nuestras necesidades plenamente cubiertas y dediquémonos a ser lo más felices posible."
No. Ningún medio ha dicho eso. Bien al contrario, todos empujan a la mujer a introducirse de lleno en el mercado laboral Citius, Altius, Fortius, insinuando o abiertamente diciendo, que la culpa de que no sean todas altas ejecutivas es del sistema patriarcal, o sea, de los pringados de los hombres.
Perfecta trampa, la naturaleza femenina en bastantes ocasiones le impide competir en el mercado laboral, sea por la menor fuerza física en los trabajos de pura fuerza bruta (son las leyes del mercado, queridas; ningún empresario quiere una señora que le cave 1 metro de zanja mientras un señor le cava 3), sea porque la maternidad la deja fuera de combate por un tiempo, sea por la tendencia de no pocas a ser ama de casa y mamá de utilitario y gimnasio al dejar los nenes en el cole. Pero la culpa de que no sean todas altas ejecutivas es de los hombres, así que a currar, a competir y a pringar, a sacrificar maternidades queridas, a sacrificar anhelos pequeños burgueses de "señora de" de té y pastas... Todo sea por la libertad. Jua jua jua.

Inevitablemente la entrada de las mujeres en su casi totalidad al mercado laboral, va a provocar en un mercado muy tecnológico-mecanizado donde no hace falta tanta mano de obra, una extrasaturación que sólo con los hombres tarde o temprano hubiese sucedido igual, pero al ser la mujer ya "trabajadora de pleno derecho", no tiene cabida que sólo con un sueldo puedan vivir 2 e hijos. Como en la condena bíblica, irremisiblemente la mujer, al igual que lo estaba el hombre, condenada al trabajo en un mercado que no da para todos y cierta tasa de paro es eterna. ¿O no querrán que produzcamos cosas que no tienen salida en un mercado saturado? Es el sistema capitalista, queridos y queridas, el mismo que nos bombardea vía medios de comunicación con lo mal que están las mujeres.

Decididamente este feminismo no es revolucionario. Quizás lo fue, no me he leído todo lo que se escribió porque cae en delirios muchas veces y me aburre. ¿Quieren la prueba definitiva? : si fuera revolucionario por el forro de los ovarios lo iba a adoptar el sistema.
Si fuera revolucionario hubiese querido liberar a los hombres de la tasa de trabajo absurdo, no caer las mujeres en ese mismo absurdo.
Si fuera revolucionario plantearía que con el trabajo de un solo miembro de la pareja se pudiera vivir holgadamente, a elegir qué miembro de los 2 en el seno de la pareja, en absoluto necesariamente el hombre ni la mujer, que lo decida cada unidad familiar. (Eh... no tengo nada contra las unidades familiares tríos, cuartetos, etcétera mientras no sean musulmanas, pero que trabajando uno sólo dé para mantener al resto la comuna, quizás me parezca excesivo...reminiscencias pequeñoburguesas). O trabajando ambos la mitad. O...lo que sea menos esta evidente trampa del sistema, camuflada de "derechos de la mujer". Pues si esto son derechos el día que os pidan obligaciones, tías, la vais a flipar en colores.

Recuerdo cuando se aprobó la legalidad del matrimonio homosexual lo muy celebrado que fue por la progresía. Pensé: "Estos son subnormales". Por lo visto lo que había que conseguir no es un modelo de unión libre que funcionase a efectos de herencias y pensiones de viudedad. No, no bastaba con un certificado de convivencia, qué va... Era necesario entrar en la misma pringada heterosexual del matrimonio, el convite, el ¨que se besen", el trajecito de Sissi, últimamente oscilando entre Sissi puta y Sissi galáctica, los amigos vestidos unos de película de Almodóvar, otras de putón que se pretende estilosa y el sobrino jevi dando la nota con unos ojos de haberse pasado la noche erosionándose los tabiques nasales a base de espit de extrarradio, el divorcio y los abogados buitres. Era necesario no liberar la heterosexualidad del yugo matrimonial, al contrario, entrar la revolucionaria liberación homosexual en la misma mentira.
Qué quieren que les diga, no me lo creo. Para llamarme machista y homófobo, pasen a comentarios por favor. No olviden decirme xenófobo, que aún no sé muy bien lo que es pero me suena exótico.

Cuando he dicho "trabajo", obviamente me he referido a trabajo asalariado.

El Desclasado, azote del capitalismo, ha hablado.   

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