Antisistema que le hacen la cama al sistema.

Aclaremos previamente algunas cosas: antisistema soy yo. Antisistema fueron José Antonio Primo de Rivera y Buenaventura Durruti. Antisistema es cualquier persona que no esté de acuerdo con este sistema, que sepa o intuya que esto es una monumental farsa, una gran mentira enmascarada de "democracia", no esté de acuerdo con esta impostura y haga por o quisiera que esto cambiase. Se puede ser antisistema desde la izquierda, desde la derecha, o desde fuera de ambas por considerar a ambas parte del sistema.

Nadie tiene la patente de antisistema.
En la actualidad podemos considerar "el sistema" como el entramado de entidades financieras, multinacionales y medios de comunicación que dirigen el mundo. El mecanismo es relativamente sencillo: en los países menos avanzados imponen directamente dictaduras o democracias bananeras claras dictaduras encubiertas. En los países más avanzados social y culturalmente imponen una falsa democracia donde las opciones a votar son dependientes de estos entramados, trabajan para ellos. Asimismo tienen comprados, apesebrados, a los sindicatos, feminismos, oenegés, etcétera. Estos apesebrados le hacen al sistema de cinturón de protección, defienden a su amo, normalmente llenándoseles la boca de "democracia" contra cualquier antisistema lúcido, al que tacharán de fascista, radical, anarquista, machista... cualquiera de los múltiples comodines que desprestigian socialmente. Para conseguir mantener el poder el sistema utiliza mecanismos igualmente sencillos y viejos como Roma: hacen que interioricemos sus consignas mediante el bombardeo adoctrinamiento de sus medios de comunicación, juegan siempre a dividirnos y nos mantienen en miedos constantes que nos hagan buscar refugio en las seguridades que ellos mismos dan: crean el problema y dan la solución. Los verdaderamente dirigentes del mundo son muy pocos y nosotros somos muchos, así que para evitar que abramos los ojos y carguemos contra ellos nos mantienen en eternas divisiones: izquierdas y derechas, islamismos radicales, separatismos, Barça/Madrid, antitaurinos, hombres/mujeres, PP/PSOE... Cualquier tema vale y mejor muchos a la vez para evitar uniones del pueblo temidas. El miedo lo crean con amenazas fantasmas, ora un islamismo radical al que nosotros mismos vendemos las armas, ora una nueva gripe, ora que si viene un meteorito...
De los pesebres que hacen de guardia pretoriana del sistema, los dirigentes saben perfectamente para quien trabajan. Los tontos útiles son todas aquellas bases que creen ser muy guays, muy progres, muy anticapitalistas y le están haciendo la cama al capitalismo. El sistema necesita a los tontos útiles como primer cinturón de seguridad a nivel de calle y para que hagan de apostolado de sus doctrinas. A cambio reciben la patente de "bueno" por parte del sistema vía sus medios de comunicación. En realidad la inmensa mayoría de los progres son pobres muchachos que necesitan la paternal aceptación del amo.
Y vamos con lo que he venido a traer: los "antisistema violentos", los okupillas, anarkistas y otros subnormales de ese calibre. No confundan "progre" por progresista ni "anarkista" por anarquista. No confundan ideologías discutibles, pero respetables, por sus patéticas caricaturas. Yo también soy progresista para unas cosas, conservador para otras y bastante anarquista, pero que Dios me libre de ser "progre" o "anarko".
Ojo a otra nueva celada del sistema difundida por sus apóstoles: la violencia es mala, siempre es condenable. Coño ¿y por qué el sistema la utiliza cada vez que le interesa? Nos quieren mansos, claro está, no nos van a decir que seamos violentos con sus violencias... Para eso ya nos dicen que utilicemos sus "mecanismos democráticos" que ellos controlan. La violencia frente a la violencia en defensa propia es lícita. La violencia gratuita es una enfermedad. No confundamos las cosas: les interesa nuestra mansedumbre, no vaya a ser que les peguemos otro susto como en anteriores revoluciones, que les llevó un tiempo reconducir la situación y algunos perdieron sus lindas cabezas. Pero hay que denigrar la violencia y ahora veremos qué otro mecanismo utilizan para hacerlo.
Leo en prensa que los antisistema violentos saquearon la tienda Levi's en Barcelona durante la pasada huelga general.

¡Ahora si que me has jodido, compañero! ¿Habrá algún símbolo más referente del capitalismo que un pantalón Levi's? (la Coca Cola y pocos más). Hubiese entendido, aunque lo hubiese condenado, que quemasen la tienda. Me hubiese parecido coherente: ¡abajo el capital y sus símbolos! Pero no... a los anarkos les gustan las marcas capitalistas y mejor saquear. ¿Y se van a poner unos Levi's, símbolo por excelencia del malvado capital? Ay, que me meo. Estos tíos ni son antisistema ni son más que una puta mierda, una basurilla incoherente, asilvestrada, malparida y peor educada. Estos tíos no son antisistema porque son puro sistema: el desague, la mierda que le sale al sistema por el culo y que él mismo crea.
Pero fíjense esta basura que favor le hace al sistema: la etiqueta "antisistema" ya casi les pertenece en exclusiva, son los antisistema por antonomasia. Si a ello le añadimos la etiqueta "violento" cuadramos el círculo y conseguimos un muy natural y justificado rechazo por cualquier ciudadano de los términos antisistema y violento. Consigue así el sistema desprestigiar de raíz el concepto de antisistema y dejar además sentado que un antisistema es violento con ese concepto malo de violencia. Y lo mejor es que esa violencia gratuita, destructiva y saqueadora es violencia despreciable. No se puede negar.
Díganme: ¿a quién le hacen la cama estos aguerridos antisistema? Cui prodest?

El Desclasado ha hablado.