Vamos a tener PP para años...

Quizá sólo debiera leer "El País" y ese panfleto alucinado de "Público", pero es que ni así.

Ni así me libro de enterarme de la saña con la que se apuñalan los socialistas obreros por quedarse con los despojos del naufragio. Que si la casi discapacitada de la Pajín (¿casi?) apuñala al osito de peluche del Alarte en ese agujero sin fondo que es la Comunité Valenciané, que si el malvado Rubalcaba envía al exilio a los partidarios chaconistas de la facción derrotada en las luchas por el poder, que si el perdedor en todas las batallas, Tomás Gómez, protesta por su cacho al apostar por caballo (yegua en este caso) equivocado, en ese artificio de comunidad de mandril, capital de las ejpañas, que si...

Sí, ya lo sé, que si me quiero hacer de izquierdas, que no es el caso, y tener una guía, un faro que me ilumine, que me haga de los bolcheviques camuflados de Izmierda Hundida. ¿Me han visto cara de gilipollas?

Para acabarlo de arreglar, leo en el diario de aquel que se hacía encular y mear por una negra, mientras él hacía de perrita viciosa con ligueros, que si el psicópata de Garzón pretende montar un "Frente Popular" a ver si los españoles volvemos a nuestras viejas costumbres y nos matamos unos a otros de nuevo, que ya llevamos tiempo sin hacerlo y la idiosincrasia de un pueblo es la que es.

De verdad que no creo que nos merezcamos esto. Estoy de acuerdo con medidas que está tomando el PP, tipo la separación de los poderes con el caso de la Justicia y recortarles por decreto el sueldo a los banqueros de las cajas, aunque preferiría medidas menos tibias y que se hiciera justicia de una puta vez y viésemos entre rejas a los culpables, con la complicidad del pueblo, no lo olvidemos, de habernos traído hasta aquí. Pero bien, mejor que se haga algo tibio que no hacer nada, aún no tengo motivos para cargar duro contra el PP, siendo que me siento como recibiendo una de cal y una de arena, no pozalada de mierda tras pozalada, como en el zapaterismo.

Pero no, coño, no, el país no se merece esto. No podemos dejar de tener una izquierda que equilibre los desmanes que la derecha creerá ley natural en cuanto se afiance en el poder. No creo en izquierdas y derechas, esto es un circo del Capital, pero si este es el tablero de juego en el que tengo que vivir, y no tengo posibilidad de cambiarlo, exijo que se cumplan las reglas: quiero una izquierda combativa, honrada, repartidora e igualitaria, no esta mierda de engendro tutelada por el capital que le preocupa más con quién me acuesto, que si me puedo pagar una casa para vivir, y acostarme en ella con quien me salga de los huevos, nunca mejor dicho, si se deja.

No puede ser que no tengamos Izquierda, que tengamos un sucedáneo compuesto de trepas, arribistas, pequeños comisarios, fachas frustrados, feminazis y sindicalistas barrigas llenas.

No puede ser, porque se rompe el equilibrio, se descompensa la balanza, da todo igual en ese caso y sálvese quien pueda, maricón el último y cada perro que se lama su pijo. Y la gente más débil queda a merced de los poderosos, sin más defensa que lo que puedan mal vender de su cuerpo, ya como braceros, ya como poner el coño para comer. Y la historia de la Humanidad no puede acabar así, no hemos avanzado hasta proteger a los más débiles para volver atrás, no puede ser que la Izquierda se apropie de delincuentes, gandules, homosexuales y mujeres, haciéndolos pasar por "débiles a proteger" y ahí acabe su recorrido. Necesitamos una izquierda de personas normales, esto es: de todo tipo, no lloricas subvencionados mendigos del Capital. Necesitamos una izquierda a la que usted y yo le podamos y debamos tener un respeto, no este conglomerado de comemierdas.

Normalmente, y esto nunca cambia, ni bajo dictablandas ni demoduras, hay que recurrir al humor para poder decir verdades:

Ser facha o rojo afecta profundamente al alma, que queda muy marcada por la facción.

Los cosmólogos teólogos han comprendido la esencia mística de esta división de los españoles. Al parecer, la lucha entre estas dos fuerzas antagónicas es la que preserva la armonía del Universo.

Si sólo hubiera rojos, todo sería destruido por las llamas. Si sólo hubiera fachas, la humanidad sería esclavizada.

Por tanto, esta lucha no puede ni debe resolverse. Por eso cuando una de las dos fuerzas ha estado a punto de aniquilar a la otra, siempre ha surgido un Campeón del lado contrario, que ha equilibrado la lucha.

Ejemplos de estos campeones han sido Santiago Carrillo y Ángel Acebes.

Es de la Frikipedia, claro, bastante más fiable que la Wikipedia.

Por el bien de este país y de la humanidad, para no acabar todos esclavos de 4 banqueros, necesitamos una izquierda digna que se deje de preocupar por el imaginario folclórico progre, vuelva a recoger lo que de Marx quedó salvable y se preocupe por la economía; por lo E-CO-NÓ-MI-CO, que con la barriga llena y las necesidades cubiertas a la gente le suele importar una mierda con quién folla el vecino. Para eso, la izmierda actual debiera dejar de odiar a su propio país, creo que un caso único en el mundo, los españoles siempre dando la nota.

Y la necesitamos, debe surgir y arrollar a los pijoprogres de la pesoe y a los sucedáneos de mi hermano mayor durante el franquismo, de muchachotes barbados con jersey de lana y focas con vestidos que parecen túnicas de Demi Roussos,  jugando a bolcheviques marisqueros. Y marisqueras y marisquer@s, por supuesto, que esas gilipolleces nos van a dar de comer. Muchas izquierdistas viven de ello mientras usted no encuentra trabajo.

O sálvese quien pueda y maricón el último, que yo me sé buscar la vida y he desarrollado el necesario cinismo para que me importen una mierda las gentes que no luchan por sí mismas.