La incansable labor de investigación de este blog ha dado sus frutos. Sí, hemos encontrado a alguien que parece haber leído el Ulises de Joyce, o cuanto menos ojearlo en profundidad.
Atentos al testimonio gráfico, que el tema no es baladí: la señorita en cuestión tiene abierto el Ulises por ¡casi el final!
Esto no es todo: siguiendo con la investigación, este blog ha tenido acceso a esa edición del Ulises y ¡no tiene fotos ni dibujitos en el interior! ¡Es pura letra!
Habida cuenta de que el autor de este blog, pese a su cociente intelectual de 173,5 y me llevo 2 (Escala de Romina Power y Albano), sólo ha conseguido mal leer el Ulises hasta la página 14 el día que se puso chulo y dijo que: "por mis cojones que me tengo yo que leer esta mierda, que esto no va a poder conmigo", creemos que debemos asombrarnos ante la proeza de la señorita.
Sin más preámbulos, aquí tienen el documento:
Marilyn Monroe enfrascada en el Ulises. Observen la expresión de profunda reflexión que denota haber extraído la savia del texto.
Aunque esta entrada es de corte claramente académico, si no digo lo de: "Rubia de bote, chocho morenote", reviento.
Y el mío casi sin abrir, acumulando polvo. ¿Y si pruebo a teñirme de rubio?
Y el mío casi sin abrir, acumulando polvo. ¿Y si pruebo a teñirme de rubio?
Yo tampoco lo he leído... Tengo la edición de Bruguera con traducción y notas de José María Valverde...Algún año, alguna otra vida... no sé..
ResponderEliminarA ver, a ver, por partes: o tienes la mano muy grande o tu libro es más pequeñito, ¿no será una edición de esas resumidas para niños y con letra grande?, jaja.
ResponderEliminarLo de teñirse de rubio es cosa de ellas, lo vuestro ahora es esto.
Me fijé en los dedos de los pies y tiene el segundo más corto que el tercero. Por sacarle algún defecto.
;-)
Bicos.
David: juraría que no conozco a nadie que sinceramente reconozca haberse leído ese tostón. Habré hecho comos unos 10 intentos, cuando me he quedado sin nada que leer, y no puedo pasar de unas paginitas; me entra sueño, me pongo a pensar en otras cosas...
ResponderEliminarY te lo dice alguien que se leyó "El péndulo de Foucault", que a í el valor no se me supone.
Blue: es que está muy comprimido, jaja. Y el de Marilyn igual es para posado, porque si se leyó el Ulises en ese banquito que apenas le cabe el pandero, y en esa postura, lo de su suicidio empieza a aclararse.
Eres cruel con lo de Clooney. Santo dios, lifting testicular..
Eso es porque no conoces a mis amigos.
ResponderEliminarTengo uno que se lo leyó con 17... regalo de su profesora de literatura. Y otro que se lo ha leído... y además en inglés.
Yo lo más "así" que he leído me da que ha sido "El sonido y la furia" de Faulkner... y la verdad es que me encantó y lo pasé como un enano relacionando tal párrafo de tal página con tal otro de tal otra (jaja)...Igual hasta me gusta el Ulises de Joyce si me pongo (jaja)... Pero qué pereza...Ahora estoy con "Los miserables"... y luego quería ponerme con Dickens...así que Joyce tendrá que esperar.
Un saludo.
PD: No te metas tanto con Marilyn
Espera que venga Maia, que si no recuerdo mal, lo leyó. Creo que había hecho una entrada con un pequeño texto del libro, y no pintaba nada mal...
ResponderEliminar;-)
David, hasta mi mujer me ha reñido: "Que si la chica leía, que si no era burra".
ResponderEliminarA ver Maia qué cuenta.
El leerse el Ulises es como lo del "gitano que esta él solo, en Urgencias", puede ser posible, probable, factible, pero no se conocen testigos oculares de estos hechos.
EliminarJajajaja.
ResponderEliminarNo se donde se ha ido mi comentario
ResponderEliminarA spam no ha ido, Genín, lo acabo de comprobar.
ResponderEliminarBuenas noches.
Joer, qué tarde es ya. Bueno, yo lo intenté honradamente pero tampoco pude pasar de las primeras páginas. Que sí, que será un clásico de la literatura mundial pero eso no pasa ni con aceite. No obstante, para equilibrar camas y armarios viene cojonudamente (Qué bárbaros somos, como vilipendiamos una joya cultural, mein got)
ResponderEliminarNi yo, pero ya caerá...
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarYo tampoco lo he leído, al menos no entero. Y no me preocupa en absoluto decirlo. Yo creo que hay novelas que están hechas para ir leyendo a trozos. Los trozos sí los he leído. Y el Ulises tiene dos tipos de trozos: los que cuentan una historia, ni que sea caótica, y los que no cuentan nada, solamente son como ejemplos de técnicas narrativas. Los primeros los leí y disfruté mucho, porque tiene cosas muy interesantes (cuando el periódico, el principio, el monólogo de Molly, el trozo de la playa que es impresionante...) Los segundos los leí en la carrera y son muy aburridos, técnica del collage, fluido de conciencia, todo eso...
ResponderEliminarHe estado en Dublin estas navidades y de repente un día me dio por recorrer, por mi propia cuenta (y riesgo) el Dublin del Ulises. Mientras lo hacía pensé que esta es la novela que no he leído entera (se entiende, de la primera a la última página sin saltarme ninguna) la novela que no me he leído entera que más me ha marcado. Una cosa extrañísima. Porque fíjate que me llegué a conmover cuando pasé por la calle de Leonardo, jiji. Soy literariamente mitómano.
Y otra cosa, no te metas con Marilyn. Era más culta y con más sensibilidad que la mayoría de calentorros que la rondaban.
Después de varios intentos, entre ellos el de de obstinarme en confirmar la teoría de la página 50...según se dice una vez superada no hay vuelta atrás, lo dejé por imposible. Lo curioso es que poco después iba caminando por la calle y me crucé con un chico que...ojo al dato...lo iba leyendo por la calle!!...edición bolsillo para más inri. Descripción del tipo; larguiducho y moreno. Así de buenas a primeras descartaría lo de teñirte el pelo...tal vez dando un paseo??
ResponderEliminarUn saludo