Las revoluciones y las tetas ya no son lo que eran.

Por cortesía de Blue, traigo la verdad sobre mi anterior entrada de tetas revolucionarias:

No es más que una perrilla haciéndose publicidad sobre su libro (su película en este caso), aprovechando una manifestación bienintencionada para cambiar el mundo y eso.

Nada que no resuma un tanto el espíritu del Capital: como del cerdo, aprovecharlo todo.

No deja de tener las tetas bonitas, mercenarias, sí, pero bonitas.

Todo mi desprecio para la jipi perrilla que vende sus tetas al público para hacerse publicidad.

Fuente: http://www.vice.com/es/read/estas-tetas-matan-fascistas (ESTAS TETAS MATAN FASCISTAS).

Entre la revolución no conseguida y los craneos partidos, el 25S supuso un pequeño bajón. No obstante, hubo una foto que brilló como un rayo de luz entre tanta brutalidad policial y sueños rotos. ¿O deberíamos decir dos rayos de luz?

Tras una exhaustiva búsqueda en internet (empezando por su perfil en Modelmayhem.com), rastreamos estos dos faros de esperanza revolucionaria hasta llegar a su propietaria, Jill Love: modelo, actriz y cineasta independiente. Y la mejor publicidad que el movimiento anticapitalista jamás pudo soñar. Las mayúsculas son suyas.

VICE: Hola, Jill. Eres una catalana afincada en Santa Fe, Norteamérica, y te dedicas al cine. ¿Correcto? ¿Algún dato biográfico (casi escribo biológico) que quieras añadir?
Jill: Soy catalana, nacida en Tarragona. A los 18 años me mudé a Madrid para iniciar una nueva vida. Y a los 26 me fui a Estados Unidos para comenzar de nuevo. Sigo moviéndome e iniciando nuevas aventuras cada día.

Debes estar recibiendo mucha atención gracias a la foto. ¿Esperabas esta reacción?
Para nada. Yo estaba de rodillas delante de la policía, rezándole a ISIS. Tenía los ojos cerrados. Cuando los abrí estaba rodeada de un montón de fotógrafos. Se salió de control. Me marché cuando todo se volvió demasiado caótico.

Espera… ¿Isis?
ISIS es la DIOSA EGIPCIA de la naturaleza y la fertilidad, y patrona de la magia. Desde que conocí su mundo, ella no ha hecho más que aportarme paz, amor, tranquilidad y harmonia. Perdí el miedo a la muerte. Ella es la diosa de los mil nombres y nunca desapareció pero ahora ha vuelto más fuerte que nunca para ayudarnos a la ascensión evolutiva y paz mundial.

¡Vale! ¿Y la reacción a la foto en internet qué? ¿Te acecha en internet gente que no sea periodista?
La situación me está abrumando un poco, sí.

¿Y qué reacciones ha habido dentro del 25S?
Muchos ciudadanos han comprendido que el mío fue un acto de AMOR y PAZ. Otros creen que fue una forma fácil de llamar la atención. Los hippies cambiaron el mundo en los 60. Los pechos desnudos y las flores son las armas más poderosas.


¿Qué te pasaba por la cabeza en ese momento? ¿Era una postura de yoga?
Le rezaba a ISIS. Primero de rodillas y luego de pie.

¿Qué te empujó a acudir a la protesta?
Fui sola. Ninguno de mis amigos estaba disponible.

¿Has tenido alguna relación con el 15M/Occupy?
Soy una activista de Facebook. En algunos aspectos sí, me he involucrado, en Estados Unidos y en España.

¿Es la primera vez que has luchado contra el capitalismo con las tetas?
Hice lo mismo en San Francisco, en un Occupy Oakland, durante el movimiento Occupy Wall Street.

Es evidente que existe una tradición de emplear el desnudo femenino como afirmación política. ¿Conoces Femen?
Me gustaría saber del tema. Creo que es algo muy poderoso. Marianne guió la Revolución Francesa con sus pechos desnudos y una bandera.

He visto el trailer de Saving Isis y me ha sorprendido gratamente. Parece tener cierta deuda con los cineastas experimentales. ¿A qué directores admiras?
Lynch, Buñuel, Kubrick, Haneke y Hitchcock.

¿Cómo lo has financiado?
Mediante crowdfunding.

¿Puedes contarnos algo sobre tus otros films? Cómo los describirías, qué te interesa a nivel visual.
Mis películas tratan sobre sueños y pesadillas, la vida y la muerte, la luz y la oscuridad. Son fantásticas y oníricas. El nombre de mi compañía de producción es Day’s Dream. Esa fue mi primera película, The Dream of Day. La segunda fue WAVES, un cuento de amor y obsesión. Es una historia lesbiana que transcurre en San Francisco.

Suena estupendo. Gracias, Jill.